“Fuego interno en el Partido Nacional: rechazo a Nicolás Olivera por llamar ‘medio pelo’ al gobierno de Lacalle Pou”

Las declaraciones del intendente de Paysandú, Nicolás Olivera, calificando al gobierno de Luis Lacalle Pou como “medio pelo”, no pasaron desapercibidas dentro del Partido Nacional y generaron una fuerte repercusión entre sus dirigentes. El comentario, inesperado por venir de uno de los referentes más visibles del propio oficialismo, provocó incomodidad y reacciones inmediatas en la interna blanca.

Según publicó El País, las primeras respuestas surgieron desde Salto, donde se encontraba reunida parte de la dirigencia nacionalista. Entre quienes salieron rápidamente a marcar posición estuvieron el exsenador Luis Alberto Heber y el senador suplente Jorge Larrañaga Vidal, quienes rechazaron con firmeza las expresiones de Olivera.

Heber señaló que las palabras del intendente fueron injustas con un gobierno que, a su entender, enfrentó momentos difíciles y logró mantener el rumbo del país en un contexto complejo. En la misma línea, Larrañaga Vidal expresó que los dichos de Olivera no reflejan el sentir de la mayoría del Partido Nacional, y consideró que este tipo de comentarios solo generan divisiones internas innecesarias.

Las declaraciones del jefe comunal sanducero también causaron sorpresa porque Olivera había sido hasta ahora un dirigente cercano al presidente y una figura con peso dentro del interior del país. Su crítica, directa y sin matices, fue interpretada por algunos dirigentes como una señal de distanciamiento y por otros como un reflejo de tensiones acumuladas en la interna blanca a medida que se acerca el ciclo electoral.

De esta manera, el comentario del intendente no solo abrió un nuevo frente de debate dentro del Partido Nacional, sino que también dejó al descubierto las diferencias de visión sobre el legado que dejará la administración de Lacalle Pou.