Intento de rapiña en Brazo Oriental: policía abatió a un delincuente y detuvo a otro

En la mañana de este sábado, un restaurante ubicado en el cruce de General Flores y Luis Alberto de Herrera, en la zona de Brazo Oriental, fue escenario de un intento de rapiña que terminó con un delincuente muerto y otro detenido.

Según la información policial, dos individuos llegaron en una motocicleta. El que iba de acompañante bajó con un arma en la mano y entró directamente al local. Dentro del restaurante estaban los trabajadores y algunos clientes que, en cuestión de segundos, quedaron atrapados en la situación. El ladrón apuntó al personal y exigió el dinero de la caja mientras hacía amenazas para apurar el robo.

Lo que el asaltante no sabía era que entre las personas que estaban en el lugar se encontraba un policía —fuera de servicio— que estaba desayunando. Al ver que el delincuente estaba armado y que la situación podía terminar en una tragedia, el funcionario se identificó como policía. En ese instante, se produjo un intercambio muy rápido: el agente desenfundó su arma y disparó contra el asaltante, quien cayó en la zona de la cocina y murió prácticamente en el acto.

Mientras esto ocurría adentro del restaurante, el cómplice esperaba afuera en la moto. Al escuchar los disparos y ver que algo había salido mal, intentó escapar acelerando para irse del lugar. El policía, al notar la maniobra, realizó varios disparos hacia el exterior a través del vidrio del local para impedir la fuga. La moto terminó cayéndose, y el segundo delincuente trató de huir corriendo, pero fue alcanzado y detenido pocos metros más adelante por los efectivos que llegaron como refuerzo.

En el lugar se incautó el arma que llevaba el asaltante abatido y la motocicleta en la que habían llegado, que no tenía matrícula colocada. No se registraron heridos entre los trabajadores ni entre los clientes, y el policía tampoco resultó lesionado.

La fiscalía tomó el caso y ya está analizando cómo se desarrolló toda la secuencia, revisando cámaras de seguridad de la zona y tomando declaraciones para determinar con precisión cada uno de los movimientos, tanto de los delincuentes como del funcionario policial.

El restaurante permaneció cerrado durante varias horas mientras se realizaban las pericias, y vecinos de la zona comentaron que se escucharon varios disparos seguidos, generando preocupación en un barrio que ya ha tenido episodios de inseguridad en los últimos meses.